Yagé

El yage, o ayahuasca, es una medicina sagrada de la selva amazónica.

Consiste en una mezcla de dos plantas autóctonas: Banisteriopsis caapi y Diplopterys cabrerana. Su preparación se lleva a cabo en la selva, y requiere varios días de cocción al calor del fuego abuelo y abrazado por las oraciones sagradas que los ancianos tradicionales yagé realizan para lograr su propósito de curación, y la curación de la humanidad. Esta medicina puede aportar mucha claridad, luz, armonía y amor a tu vida cuando es guiada de forma respetuosa por los taitas, o curanderos, portadores de la antigua tradición de sus tribus indígenas.

La ayahuasca ha pasado por una expansión masiva. Se debe observar que hay quienes comparten la medicina con el conocimiento, el permiso de las comunidades tradicionales y los estudios adecuados para administrarla a otros; pero también hay quienes desafortunadamente, aunque bien intencionados, la administran sin la preparación precedente, olvidando o descuidando todo el misterio que ha permitido el estudio profundo de esta planta sagrada por medio de nuestros ancestros. Esto puede ser, y ha sido contraproducente en los procesos de quienes toman la medicina sin saber o entender cómo debe ser el abordaje adecuado. Por ello, cuando se decide participar en ceremonias, es por esta razón y de significativa importancia estar bien informado sobre las personas que las realizan.

(Como comparación cultural, los médicos de medicina tradicional del Amazonas que están "autorizados" para atender a los yage se someten a un proceso de formación y aprendizaje tan riguroso, intensivo y controlado como la concesión de licencias a los cirujanos occidentales).

Según la cosmovisión indígena tradicional, la medicina yage puede traer consigo los espíritus de todo el universo, las plantas, los animales, los árboles y el agua. También puede conectarnos con diferentes dimensiones energéticas y realizar curaciones en cada una de ellas. Físicamente, puede transformar toxinas, enfermedades y malestar en vitalidad, bienestar y salud. Puede conectarnos con nuestras emociones, liberándonos de conflictos y pensamientos negativos que hayamos tenido en el pasado, transformándolos en felicidad y armonía con nosotros mismos y con todas nuestras relaciones. También nos anima a conectar con la esencia de nuestro espíritu y la apertura de nuestros corazones al servicio de la humanidad.

Esta planta sagrada puede conducirte a una comprensión profunda de tu vida, abriendo un despertar espiritual y beneficiando tu salud física y mental.

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